Redacción
Con perfil de pragmático y alejado de la lógica de bloques, el nuevo presidente de Corea del Sur, Lee Jae-myung, dará un giro a la política exterior de su país.
En su toma de posesión del pasado 4 de junio y desde la rotonda de la Asamblea Nacional, el Sr. Lee abogó por “fortalecer la alianza con Estados Unidos y consolidar la vinculación triangular con Japón y el propio Estados Unidos”.
Hasta aquí sin novedad alguna, es decir, sería continuista, pero agregó que abriría “vías de diálogo” con Corea del Norte. “Abordaré la relación con los países vecinos desde una perspectiva de interés nacional y pragmatismo”.
En el intento de conocer mejor su perfil, resulta interesante leer un ensayo que escribió Lee Jae-myung durante la campaña electoral en la que participó en 2022, en la revista Foreign Affairs.
“El antagonismo no beneficia ni a los intereses de Corea del Sur ni a su alianza con Washington”, escribió, y para ser consistente, el señor Lee eligió como director del Consejo de Seguridad Nacional a Wi Sung lac, un diplomático con experiencia de congresista, experto en temas sobre Rusia y Corea del Norte. Este enfoque ayuda a dar un giro en la política exterior debido a que el Partido Demócrata, al que pertenece Lee Jae-myung, favorece el díálogo con Pyongyang y Pekín, y es crítico hacia Estados Unidos y Japón.
En este caso, el presidente declara prioritaria la alianza con Estados Unidos, es decir, buscará la conciliación y equilibrios en su política exterior.
El tiempo recorrido entre 2022, año en el que el entonces candidato Lee publicó su texto en Foreign Affairs, a julio de 2025, han pasado diversos sucesos. Uno de ellos es el incremento de rivalidad entre Estados Unidos y China.
Washington está más atento en Corea para que ayude a contener los planes geopolíticos de Pekín.
“Estados Unidos y Corea del Sur comparten un compromiso inquebrantable de nuestro Tratado de Defensa Mutua”, comentó el Secretario de Estado de Estados Unidos Marco Rubio al felicitar al presidente Lee por su inicio de gobierno.
“Estados Unidos continúa siendo el mejor garante de la seguridad nacional de Corea del Sur”, comentó Andrew Yeo, de la Fundación SK-Korea. “Seúl hará todo lo posible por promover los intereses de seguridad compartidos con la administración Trump. Por lo tanto, Corea del Sur seguirá apoyando la alianza trilateral entre Estados Unidos, Japón y Corea del Sur”.




